MISAEL SÁNCHEZ
Antes de la pandemia, en el 2019, los ingresos propios de Oaxaca superaron los 5,118 millones de pesos.
Con la pandemia, en el 2020, bajaron a 3,939 millones de pesos y a 3,480 millones de pesos en el 2021.
Así, el ingreso per cápita no es ni de 2 pesos diarios por persona, considerando que ya somos más de 4.2 millones de oaxaqueños.
Y precisamente el gobernador Salomón Jara en su conferencia de esta semana observó esa situación.
Los ingresos propios apenas superan los 3 mil millones de pesos.
Y puso como ejemplo el caso de Tabasco que recauda más de 20 mil millones de pesos al año; más de 22 mil millones de pesos el estado de Hidalgo y otros que son más pequeños, con una mayor recaudación de ingresos propios.
Dijo que, en el caso del próximo año, propuso invertir más de 1 mil millones de pesos en caminos a agencias; otros 500 mil millones de pesos para el programa forestal y sólo con eso ya invirtió la mitad de los ingresos propios.
Por ello destacó la importancia de fortalecer la actividad turística, abandonada durante los últimos años y con un crecimiento exponencial porque Oaxaca se vende sola y está de moda en México y el mundo.
De acuerdo con el mandatario estatal, el turismo debe rescatar la economía local, en tanto se pone en marcha el corredor transístmico, con sus 12 parques industriales que, al fin, harán que la entidad cuente con un verdadero sector industrial.
El año pasado, los expertos señalaron que el ingreso propio per cápita de Oaxaca era de 339 pesos en el año, es decir, menos de un peso diario por habitante.
El 2022 no será la excepción. En los primeros 9 meses del año la captación de ingresos propios superó los 3,220 millones de pesos y se espera que al cierre del año los ingresos superen los 3,500 millones de pesos.
Mientras los ingresos propios no aumenten, Oaxaca continuará viviendo con la mano extendida a la Federación, pues sólo así podrá garantizar el gasto público.
Es tiempo de que, a pesar de no ser una política populista, el gobierno estatal, con el respaldo de los gobiernos municipales, instrumente una recaudación más importante de ingresos y que, de una vez, el cobro de impuestos, contribuciones de mejoras, derechos, productos y aprovechamientos, no esté sujeto a los vaivenes políticos, pues cuando hay elecciones, sobre todo ahora que los concejales pueden reelegirse, lo primero que hacen es suspender el cobro del impuesto predial.